Por Sonia Schoenaker
Los jueces Sandra Ehrlich, presente en la sala, y José Luis Flores y Eugenia Zabala Chacur, de manera remota, escucharon los alegatos del juicio que retomó este lunes a las 10:15. La semana pasada el desarrollo del debate se suspendió cuando los abogados de los imputados recusaron a los magistrados.
Alejandra Espinosa, Marcelo Acevedo y María Vázquez están acusados de conformar una asociación ilícita, en el marco de una investigación que comenzó hace 11 años con la desaparición de Abel Ortiz.
El fiscal Leandro Estrada abrió su alegato diciendo que la causa se inició con la denuncia de la desaparición de Ortiz, y señaló que en ese marco "comenzó a percibirse filtración de información, interferencias e hipótesis ficticias". También que el procesamiento por asociación ilícita se dictó en febrero de 2022.
Respecto a las bases fácticas y jurídicas, mencionó que se definieron dos puntos. En primer lugar, se acreditó la liberación de zonas para delitos, y en segundo término, el empleo de armas secuestradas en la Comisaría 9°, que “se perdían”. También señaló la reducción de elementos legítimamente secuestrados, negligencia y omisiones de investigar algunos hechos, frustración de pesquisas y utilización de vehículos dispuestos a personal policial.
Sostuvo, en relación a la defensa, que se pretendía desvincular la desaparición de Abel Ortiz con la sociedad ilícita, pero aclaró que “estos planteos ya están resueltos”, e insistió que hay “claramente una relación entre los hechos”.
Añadió que las evidencias que tiene el Ministerio Público Fiscal son el testimonio de más de 70 personas, informes psicológicos y pericias de criminalística.

Los fiscales de Juicio, N{estor Lucero y Leandro Estrada, y el abogado querellante, Bautista Rivadera.
En cuanto a la teoría que va a defender, aseguró que entre los imputados existió una asociación ilícita, que no solo se vinculó a la desaparición de Abel Ortiz, sino a otros delitos graves.
El fiscal Néstor Lucero, por su parte, dijo que los acusados “cometían de manera expresa” los ilícitos. Mientras que el abogado que representa a la familia Ortiz, Bautista Rivadera refirió que eran delitos contra la propiedad, amenazas, lesiones, homicidios en grado de tentativa y la desaparición involuntaria de Ortiz, lo que consideró “un hecho detonante por el cual se está desarrollando el juicio”.
Pidió al Tribunal que no analicen el caso “sumamente desde lo técnico”, sino que tengan en cuenta que están frente a un hecho que “fragmentó la confianza social porque uno de los acusados es el ex jefe de una comisaría de esta localidad”.
“A mi criterio es lo suficientemente grave como para que la ciudadanía pierda la fe en la justicia y en las fuerzas de seguridad”, sentenció.
Además, solicitó a los magistrados que presten atención, que sean pacientes y tengan la fe en que se va a comprobar que los tres acusados “son susceptibles a encuadrarse en el delito”.
Desde temprano en los pasillos del Poder Judicial se encontraba la familia de “Pochi” Ortiz. Estaban confiados, tranquilos y juntos, como se los ha visto desde siempre. A la sala de juicio ingresaron unos cuantos, y otros debieron quedarse afuera porque forman parte de la lista de testigos.
“Esta investigación que empezó en septiembre de 2014, al día de hoy se encuentra con falta de mérito”, dijo el defensor de Alejandra Espinosa, Valentín Rivadera. Sostuvo que “se ha rechazado sistemáticamente y de manera caprichosa”, el sobreseimiento de su defendida y de Acevedo.
Cuestionó el tiempo que pasó desde que inició la causa y la poca claridad en la instrucción. Agregó que el proceso “ha sido basado en presunciones y mera suposiciones para lograr imputarles el delito a estas tres personas”.
Le pidió al Tribunal que se aplique el in dubio pro reo, un principio jurídico que establece que, tras evaluar las pruebas, si existe una duda razonable sobre la culpabilidad del acusado, se debe resolver la causa a su favor.
Por su parte, la defensora oficial, Rocío Mediavilla, aseguró que la acusación contra María Vázquez, carece de sustento probatorio.
Dijo que el foco está puesto sobre tres sospechosos. “La presunción de inocencia es un principio fundamental en nuestro sistema de justicia y no puede ser vulnerado por especulaciones”, apuntó.
El abogado Pascual Celdrán, quien representa a Acevedo, sostuvo que no hay conectividad entre los tres acusados con una asociación ilícita, y que el ex policía nunca estuvo a cargo de la investigación de la desaparición de Abel Ortiz.
Los letrados adelantaron que van a asegurar la inocencia de sus defendidos y que van a pedir la absolución.
Tras los alegatos de apertura y un cuarto intermedio, se abrió la etapa probatoria con las declaraciones de testigos. En esta oportunidad, hablaron ante los jueces un cuñado de Ortiz, tres de sus hermanos y el ex comisario general de la Unidad Regional II.
El debate continuará este martes a las 9:30 con la presentación de más testimonios.


