Este jueves dos adolescentes de 17 años enfrentaron una audiencia de formulación de cargos por los delitos de encubrimiento simple (dos hechos), robo simple en grado de tentativa, robo calificado por escalamiento en grado de tentativa e incendio. La misma estuvo a cargo de la jueza Penal Juvenil y Contravencional, Daniela Benenatti. Para los chicos estar frente a la Justicia no era un desconocimiento, el Ministerio Público Fiscal había solicitado la audiencia para los días 10, 17 y 19 de septiembre y habían sido notificadas las citaciones a sus madres pero los imputados no comparecieron en ninguna oportunidad.
Ante esa situación la fiscal 4, María del Valle Durán, valoró la existencia de un riesgo procesal por posible obstaculización de la investigación y por antecedentes de reiterancia delictiva, lo que motivó la detención de ambos. Finalmente fueron detenidos el miércoles durante dos procedimientos policiales distintos. Uno fue detenido por agentes del Comando Radioeléctrico alrededor de las 15 en la avenida Illia al 500; el otro, pasadas las 18:30 en la esquina de Bolívar y avenida Lafinur. Ambos fueron identificados y puestos a disposición de la Comisaría de Atención a la Niñez, Adolescencia y Familia (CANAF), quienes se hicieron cargo de sus resguardos.
Uno de los adolescentes fue detenido en la avenida Illia.
Este jueves a la hora de resolver sobre las medidas de coerción las partes tuvieron en cuenta la situación de vulnerabilidad de los adolescentes, vinculada a problemas de adicciones y antecedentes de reincidencia. La Fiscalía solicitó medidas alternativas a la privación de libertad y la jueza Benenatti hizo lugar al planteo.
La magistrada ordenó que los imputados se presenten una vez por mes durante cuatro meses en la Fiscalía de Instrucción 4, la asistencia obligatoria a terapia psicológica ambulatoria en el Centro de Prevención de las Adicciones (CPA), terapia grupal destinada al grupo familiar y la finalización de los estudios secundarios y la adopción de un trabajo o empleo en caso de no contar con uno.
La Fiscalía fundamentó que estas medidas son esenciales para garantizar la sujeción al proceso y, al mismo tiempo, favorecer la educación y reinserción de los adolescentes, para reducir el riesgo de reincidencia. Tanto la defensa técnica, a cargo de los abogados Belén y Guillermo Levingston, como la Defensoría de Niñez y Adolescencia 3, prestaron conformidad con lo solicitado.
El miércoles, por orden de la fiscal 4, María del Valle Durán (drecha), los adolescentes fueron detenidos en la zona céntrica de la ciudad.
